La virtud de la prudencia, de auriga virtutum: conduce las otras virtudes indicándoles regla y medida. Ha pasado a ser pieza empolvada de museo arqueológico.
Una de las causas de este arrinconamiento tal vez la más importante, es la ruptura producida en el pensamiento moderno entre verdad y libertad.
El objetivo del presente ensayo es ofrecer una sucinta exposición de la virtud de la prudencia en la que puedan apreciarse dos características esenciales: La prudencia es condición de libertad, y la libertad es necesaria para ser prudentes.
Sólo a partir del conocimiento de la verdad sobre el bien se puede elegir la acción prudente, y sólo la conducta prudente hace libre a la persona.
Lo que es la prudencia lo sabe cualquiera.
Toda lengua en cada época y en cada pueblo tiene una palabra para ello, que concuerda más o menos con las palabras correspondientes de todas las otras lenguas.
Esto mismo se puede decir de su antónimo, la necedad y también acerca de las palabras o los conceptos colindantes tales como la sabiduría y la astucia.
Astuto es el que, sin otras virtudes, sólo es prudente momentáneamente; sabio, el que aplica la prudencia a su vida entera, y, en todas las decisiones, concede prioridad a la moral.
Es frecuente, caracterizar como prudente en casos particulares el comportamiento de los animales superiores o incluso el de una determinada especie: el zorro es manifiestamente prudente, el asno necio.
La libertad es necesaria para ser prudentes.
Para conocer la verdad sobre el bien y, por tanto, para ser prudentes, se requieren buenas disposiciones, es decir, el deseo eficaz de actuar bien o de buena intención.
Sin embargo, para entender adecuadamente la relación prudencia-libertad, es imprescindible advertir que el concepto de libertad al que nos referimos es aquél que sitúa su esencia no en la posibilidad de el
egir entre el bien y el mal (libertad de indiferencia), sino en el poder de obrar con intención de buena moral cuando se quiere.
La diferencia entre ambos conceptos es fundamental, y la opción por uno u otro lleva consigo un cambio profundo en el modo de entender y actuar con nuestros amigos y seres queridos.
Mientras la primera rechaza toda influencia encaminada a realizar la elección adecuada, la libertad como poder de obrar el bien acepta agradecida todo lo que suponga una ayuda en ese sentido.
No adopta una actitud objetiva, neutral, sino interesada, una disposición interior de amor al bien, que es necesaria para conocer y reconocer la verdad de buena intención.
Otro enfoque del la Virtud de la prudencia sin menoscabo de la libertad es a través de los valores
Para estos es importante los valores universales cívicos y éticos
Los valores están presentes en el organismo, La personalidad, la sociedad y la cultura humana.
Los valores no son normas de conducta, Las normas son regla para comportarte de un modo determinado.
El termino valor no lo poseen los objetos en si.
Si no que estos lo adquieren gracias a su relación con el hombre, con el ser social.
Todos los seres humanos independientemente del grado cultural y de civilización poseemos un sentido ético o moral.
Este sentido esta ligado a los actos voluntarios pues los calificamos como buenos o malos.
La culminación del acto moral, así como también de los sistemas éticos, se logran al elegir las finalidades que se realizaran en la vida.
Son valores y reciben ese nombre por contener el valor que los hace deseables.
Las virtudes éticas se refieren especialmente a la actitud moral. Los valores éticos no son los bienes si no los de las personas y sus actos. No residen en las cosas sino en la voluntad, las intenciones y los propósitos.
Las virtudes prácticas tal como su nombre lo indica corresponden a la ejecución de la conducta, y sirven para vencer las contingencias y obstáculos de la vida
La Libertad
La Libertad es una de las virtudes mas reconocidas y apreciadas por todos los seres humanos, no solo como facultad de desplazarse y de transitar sin impedimento , sino también como el poder para actuar y no actuar , para pensar y expresarse de tal manera, para decidir que hacer y como hacerlo .La Libertad se siente en al medida que se hace lo que se quiere
La Prudencia
Es la capacidad que poseen los hombres para orientar su actuación en base al uso de la razón. Esto quiere decir que ante todo la razón debe gobernar los actos de las personas y no el sentimiento.
La prudencia permite a los hombres perfeccionar sus propias actividades y perseguir su propio bien respecto al fin común de los que le rodean y de su vida misma.
La prudencia gobierna a todas las de más virtudes y su función elemental es la de conocer los fines o propósitos para actuar de una manera correcta. Lleva a los hombres a tomar decisiones efectivas que aseguran éxito y buenos resultados, cuando se es prudente imponiendo la razón a nuestra existencia, las determinaciones tomadas estarán
Muy lejos de las apariencias, ficciones y engaños que suelen presentarse.
En la vida cotidiana esto lleva a lograr seguridad confianza en si mismo y aplomo para decidir y actuar cuando la razón predomina en nuestros actos se logra reducir los errores y fallas que se cometen.
Entonces……
El hecho de ser libre me permite ser imprudente????
O si el conjunto de valores éticos y cívicos me lleva a ser libre con prudencia???
He ahí la cuestión
“La libertad obliga a la prudencia: los mutuos deberes al respeto.”
― José Martí
“Cultivo una rosa blanca. En julio como en enero para el amigo sincero que me da su mano franca. Y para cruel que me arranca el corazón con que vivo cardo ni ortiga cultivo; cultivo una rosa blanca.”
― José Martí
“La libertad es el derecho que tienen las personas de actuar libremente, pensar y hablar sin hipocresía”
― José Martí
José Martí
Nacimiento: 28 de Enero de 1853
Fallecimiento: 19 de Mayo de 1895 (42 años)
Biografia: José Julián Martí Pérez fue un político republicano democrático, pensador, periodista, filósofo y poeta cubano de origen español, creador del Partido Revolucionario Cubano y organizador de la Guerra del 95 o Guerra Necesaria. Perteneció al movimiento literario del modernismo.