Según el texto de la UNAM, «La agricultura en México: un atlas en blanco y negro»
de Atlántida Coll-Hurtado y María de Lourdes Godínez Calderón
La base material de la actividad agrícola es la tierra, el suelo. De ahí que deba estudiarse desde dos puntos fundamentales de vista: por una parte, desde el enfoque natural; por la otra, desde la perspectiva de los patrones de tenencia de propiedad que inciden en el tipo de actividad que se va a l levar a cabo.
La tierra como parte misma del medio físico
La tierra agrícola no es más que el suelo fértil; las características edafológicas determinan esa fertilidad y dependen tanto de las propiedades de la roca madre como de los agentes que le fueron dando lugar, en particular la temperatura y la humedad .
No es este el lugar de analizar las diversas regiones edáficas del país, tan solo se toman en cuenta dos aspectos del medio que inciden de manera importante en la evolución de la práctica agrícola : el relieve, del cual interesan tanto las pendientes como la altitud a la que se encuentran los suelos, y el clima, que determina las horas de insolación y los regímenes pluviales.
Es necesario aclarar que la permanencia del suelo depende del modo cómo lo tratan tanto la naturaleza (desbordamiento de ríos, erosión eólica) como los hombres, y los procesos de deforestación o las malas prácticas de cultivo dan lugar a una pérdida progresiva, y a veces irreparable, de la cubierta edáfica.
México es un país predominantemente montañoso, grandes sistemas cordilleranos lo atraviesan de norte a sur y cadenas volcánicas de oeste a este (Figura 01), de tal modo que no son abundantes las tierras planas más que en las llanuras costeras, en partes del gran altiplano central y en los valles intermontanos, así como en la península de Yucatán. Este relieve condiciona la agricultura que debe ser practicada de preferencia en terrenos de poca pendiente para evitar la erosión de la capa fértil. Infortunadamente, no es raro encontrar campos de cultivo precarios en zonas montañosas de elevadas pendientes.
En México se dan todos los climas debido a las estructuras montañosas y a la situación del país en la zona intertropical del planeta (Figura 02): del cálido húmedo de las costas al templado con lluvias de verano de las montañas y a los climas áridos prevalecientes en el centro y norte del país. Esta diferenciación climática permite u na riqueza agrícola sin par ya, que pueden producirse todo tipo de cultivos: los tropicales en las costas y regiones sur del país con cultivos tipo plantación, de frutales o de cultivos industriales y que corresponden a regiones de clima A y con una vegetación natural de selva o bosque tropical (Figuras 03 y 04).
Las regiones de clima templado corresponden en su mayor parte a las grandes Sierras Madre, por lo que su vegetación típica es la de bosques mixtos o bosques de coníferas; de hecho, en los valles intermontanos es donde se practica una rica agricultura de especies cerealeras, de frutales y otros cultivos (Figuras 05 y 06).
Las regiones de climas áridos y semiáridos, el norte y la península de Baja California, no son aptas para la agricultura a menos que se apliquen técnicas e inversiones importantes, en particular en obras de irrigación. Corresponden a regiones agrícolas polarizadas: las verdaderamente productivas y las de autosubsistencia en las que no hay inversión alguna más que la fuerza de trabajo del campesino (Figuras 07 y 08).
Para mostrar más claramente la imagen geográfica de los suelos agrícolas se presenta la información a nivel municipal que confirma lo expresado más arriba: el suelo ocupado por la agricultura se concentra de manera importante en las regiones planas de las costas, en los grandes bajíos intermontanos del altiplano central y en aquellas zonas de la península de Yucatán en donde la vegetación natural ha dado paso a campos de cultivo (Figura 09, 10 y 11). El mapa deberá compararse con otros de superficies ocupadas por los distintos tipos de tenencia de la tierra, así como con los mapas de cultivos.
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1 comentario sobre «La tierra como sustento de la agricultura»